Reciclaje: negocio verde que crece

Definitivamente, para que un país y sus pobladores tomen en serio el reciclaje se necesita incentivar que es un buen negocio. Varios investigadores sostienen que los costos financieros de la Gestión Integral de los Residuos Sólidos (GIRS) para un país son complejos y dependen de diversos factores, entre ellos cuán grande es el territorio, el volumen de residuos, las tecnologías empleadas (reciclaje, rellenos sanitarios), cuánto conoce la ciudadanía al respecto, y la infraestructura disponible para recolectarla y tratarla.
La inversión en reciclaje significa apostar en infraestructura y equipamiento, operación y mantenimiento, así como realizar acciones de concienciación. Para otros especialistas, una gestión eficaz genera a tiempo determinado beneficios económicos y ambientales al reducir la contaminación, preservar recursos y crear nuevas oportunidades económicas a través de la economía circular.
Se estima que el costo de la gestión integral de residuos sólidos varía y depende de cada país y su infraestructura, estimándose el costo global del reciclaje en 640 mil millones de dólares para 2050. Los costos específicos dependen del tipo (industriales, domésticos o de alimentos) y volumen de residuos, así como de la calidad del servicio; requieren métodos de tratamiento y manejo distintos, según el BID.
¿Que si es un buen negocio reciclar? Pues sí, al generar beneficios económicos luego de la transformación de residuos en nuevos productos. Un ejemplo es la industria global del plástico reciclado, que en 2021 generó miles de millones de dólares y sigue creciendo anualmente. Empresas como Nucor (acero), Ford y GM (automoción con plásticos y cartón), y organizaciones innovadoras como Biobox (plásticos) y Svalka (varios) ganan dinero al integrar el reciclaje en sus cadenas de producción y distribución.
El secreto es la creación de valor, es decir, transformar materiales de desecho en materias primas valiosas para fabricar nuevos productos, lo que permite a las empresas reducir costos y aumentar ingresos. Y, según el rubro, existe una demanda de materiales reciclados en sectores como el de embalaje, automoción y textil, que intentan cumplir con los ODS y regulaciones ambientales.
En el Perú, en 2024 se tuvo una mejor valorización de los residuos, llegando a las 249 000 toneladas, según el Minam, cifra que ha sido 35,4 % superior al año anterior. Ello gracias a la conciencia ciudadana y las obras que realizan determinadas autoridades locales con el recojo y recolección adecuada de los residuos de las casas de los pobladores.
De esa manera, según el Sigersol Municipal y Programas de Incentivos, diversas ciudades mejoraron la gestión de los residuos sólidos: el distrito de Chaclacayo encabeza el ranking nacional con una valorización anual de 9847,11 toneladas, seguido por San Juan de Lurigancho (7228,79 t), Municipalidad Provincial de Satipo - Junín (6499,64 t), y San Jerónimo y San Sebastián.
Los ciudadanos y las autoridades deben seguir trabajando en el reciclaje para mantener un planeta limpio y saludable para todos.

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