Organismo acumula pasivos por más de US$ 7,900 millones y afronta incumplimientos con proveedores y bancos, mientras su principal proyecto, la Refinería de Talara, no genera ingresos suficientes para cubrir el servicio de deuda.
Clasificadora de riesgo indica que salvatajes deterioran la fortaleza fiscal del Perú y denotan un serio desvío de recursos que deberían destinarse de mejor manera.