En los momentos más dramáticos de nuestra ya bicentenaria historia republicana, a la oposición se le ocurre actuar con guantes de seda, ataviada con galas democráticas, mucha cortesía, anteponiendo un talante afable y respetuoso de los detalles políticos, cuidadosa del gesto buenista y todos los rasgos de empatía posibles, delirando que de esa manera resistirá los embates del comunismo.
Luis García Miró Elguera
“Tendríamos que ir a Estados Unidos para engañar a los inversionistas. En eso tú eres muy bueno”. Este pudiera haber sido el consejo de Pedro Francke a su tocayo Castillo, para embarcarlo a la meca político-financiera del mundo. De otra forma no se entiende lo que hemos vivido en sólo una semana.
Comentábamos ayer esa desunión que campea entre los sectores que acogen el pensamiento centrista, tanto de derechas como de izquierdas. El análisis revela una terca dispersión, aislamiento, hasta ruptura. Distancias que impulsan celos enfermizos entre los caudillos que manejan las dirigencias entre las diferentes vertientes del centrismo.
El Perú está gobernado por la peor gente de su bicentenaria historia republicana. No es un exabrupto ni una exageración. ¡Es la incontrastable realidad!
Es muy alarmante el método silente que aplica el presidente Castillo para gobernar. En primer término, mantiene desconcertada a la población, desubicado al gabinete y paralizado al Estado.
Vizcarra confabuló con la izquierda para asegurarle el triunfo electoral. Ensamblaría un conjunto de organismos estatales, cómplices de un fraude, para consolidar en el poder Ejecutivo al grupo comunista, senderista, pensamientogonzalo que configura el partido Perú Libre, cuyo candidato presidencial fue el hoy mandatario Pedro Castillo.
La audacia del mandatario Castillo es de vértigo. Durante su viaje por Norteamérica se ha reunido con diversos personajes de la política y economía primermundista. Gente acostumbrada sólo a prestarle oídos a mensajes brillantes, pronunciados con absoluto respeto, debida sintaxis, correcto uso del idioma, etc. Aunque sobre todo, preñados de lógica, sinceridad y verdad.
Ronald Reagan, artífice junto con Margaret Thatcher de ese exitoso Mundo liberal de los ochenta, noventa y mediados del dos mil –que diese paso al mayor desarrollo de la sociedad global en materia tecnológica, dinamización de la economía orbital, etc.- dijo esto sobre la actitud del ciudadano ante el Estado: “Nosotros, el Pueblo, le decimos al gobierno qué debe hacer en vez de que el gobierno d
El mandatario Castillo utilizó su gira por Norteamérica para promover la esperpéntica premisa de los zurdos de apoderarse del Estado para perennizar su mando autócrata, conocida como la asamblea constituyente.
La llegada a México del presidente Castillo, proclamado mandatario por un comunista que preside el JNE, marca un baldón para el Perú. Porque primero, fue una vergüenza nacional contemplar a Castillo, llevando puesto el sombrero luminoso, siendo recibido por el secretario de Exteriores mexicano. Como si el jefe de la cancillería de aquel país le hubiese atendido vistiendo sombrero de charro.
El Congreso ha demostrado que, cuando quiere, puede actuar a favor de la sociedad.
Para este escriba, la Comisión de la Verdad CVR reescribió antojadizamente nuestra historia entre los años ochenta y noventa. Introdujo una narrativa perversa, que acabó victimizando a los terroristas y criminalizando al Estado peruano. Empezando por las FFAA, la PNP y los políticos que estuvieron a cargo de gestionar el país durante esas décadas.
Pomposamente, ayer el Congreso celebraba su 199 aniversario fundacional. Aunque en rigor, ¿qué podría celebrar un Legislativo que traiciona su razón de ser, su esencia democrática?
¡Nuestra sociedad está cataléptica por la ignominia de su clase dirigente! Una ralea de cobardes.
Transcurridas más de 52 horas desde que apareciera esa feliz noticia de la muerte del genocida guzmán, el gobierno comunista, prosenderista de Pedro Castillo guarda total silencio, en clara muestra de su desesperación por no saber cómo enfrentar un suceso que le afecta íntimamente.
¡De haber muerto abimael guzmán, debe estar revolcándose de felicidad! Aunque para este escriba, la noticia continúa sin confirmar por la sospechosa conducta del régimen Castillo. El Ejecutivo se ha desligado del asunto, cediéndole los trastes a la Fiscalía. Por ejemplo, para la entrega del supuesto cadáver.
Los peruanos contemporáneos conforman una sociedad invertebrada, desconcertada, confundida, perdida en el espacio tiempo de una historia reescrita por una corporación mundial de grandes intereses, dirigida por seres siniestros como George Soros.
Los caviares son culpables de haber sembrado la semilla comunista entre la juventud peruana. En concreto la Comisión de la Verdad, presidida por Lerner y conformada por la izquierda peruana, como una concesión del delincuente Toledo para que los zurdos le dejasen robar. Comisión que emitió un infausto informe reescribiendo la historia del cuarto siglo de terror que soportó el Perú.