En vana desesperación –y secuestrado por la mafia progre-marxista– el vizcarrismo da bandazo tras bandazo en una atropellada carrera hacia ninguna parte. Este frenesí es para no perder protagonismo. Y sobre todo, para no caer en el rating de las encuestas prefabricadas por la prensa mafiosa vendida a Palacio a cambio del avisaje estatal.
Luis García Miró Elguera
Los fiscales-actores Vela Barba y Pérez viajaron pomposamente a Brasil, decididos a firmar un pacto traicionero con la corrupta Odebrecht que establece una indemnización sin duda risible –en proporción al daño producido al Perú por esta constructora venal– y excluye de la investigación a los principales proyectos generadores de corrupción, como Rutas de Lima, Central Chaclla, Gasoducto del Sur,
Transitamos por un nuevo episodio del “Niño Costero”. Una variación del Fenómeno del Niño que ya viviéramos, con consecuencias tremendamente serias para el país. Particularmente en el norte del territorio, donde ocurrieron diluvios que dejaron bajo el agua a muchas ciudades, pueblos y villorios, afectando gravemente a cientos de miles de connacionales.
Aparte de constituir toda una fechoría los latrocinios perpetrados por gobernantes como Toledo, Humala, Kuczynski y Vizcarra –a través del magneto de la corrupción llamado Lava Jato– estos personajes cargan sobre sus hombros otro atropello contra nuestro país: haber cometido la temeridad de tergiversar, de manera probablemente delictiva, las verdaderas necesidades del Estado peruano para sustit
Comentábamos estos días las semejanzas que hay entre los regímenes PPK-Vizcarra y fujimontesinismo. Las tácticas usadas por ambos son similares, aunque envueltas en criterios y en directivas distintas.
El régimen Vizcarra ya ni siquiera menciona de soslayo el monumental problema de la inseguridad ciudadana.
Empieza la fase más aguda del régimen Vizcarra. Luego de haber sometido al Poder Legislativo, comprado a la prensa, convertido en coto palaciego al Ministerio Público y neutralizado al Poder Judicial, el próximo ciclo es agudizar las tensiones a través de esos dispositivos transformados en armas de arremetida para anular cualquier asomo de oposición.
La huelga nacional de transportistas de carga viene siendo silenciada por el Gobierno. No obstante que la dimensión de esta protesta tiene ribetes preocupantes, el Ejecutivo –y sus corifeos mediáticos– prefieren echarle tierra pretendiendo tapar el sol con un dedo. Por ahora la convocatoria del paro es por tres días.
Ahora resulta que quienes criticamos la mala gestión del régimen Vizcarra buscamos “afectar la lucha contra la corrupción”. Es decir, el presidente Martín Vizcarra se pone como el epítome de la anticorrupción, cuando cada vez afloran más evidencias que lo colocan en la propia frontera de este cáncer en nuestra nación.
La progresía marxista-capitalista se desespera porque los fiscales todavía no solicitan prisión preventiva para el expresidente García. Vamos por partes.
Un hombre de absoluta confianza del entonces candidato presidencial Pedro Pablo Kuczynski –posteriormente elegido primer mandatario– fue Alfredo Thorne Vetter.
La Sala Plena de la Corte Suprema del Perú tiene delante suyo un asunto de capital importancia que, de no saber resolverlo con la altura de miras que exige este momento, pudiera acabar hundiendo del todo el prestigio ya bastante maltratado de este poder del Estado. Los peruanos andamos muy cabreados con quienes tienen a su cargo impartir Justicia entre la sociedad.
Bueno, el alfil Rafael Vela Barba y el peón Domingo Pérez hicieron su trabajo. La reina Zoraida Ávalos les facilitó el camino. Por su lado el asistente Miguel Ramírez cumplió las órdenes de su jefe Vicente Zeballos. Encima de todo, quien diera el visto bueno a este team de operadores fue el primer mandatario Martín Vizcarra.
En reciente entrevista a la economista norteamericana Deirdre McCloskey, el periodista colombiano Fernando Quijano Velasco la motiva a hablar sobre “el fracaso de los modelos económicos populistas; las tesis igualitarias que consumen a los economistas y la moda reinante en las ciencias sociales de buscar la equidad, sin pensar primero en el crecimiento económico”.
Este martes sonaron todas las alarmas en Palacio de Gobierno. Ese día el portal Gato Encerrado publicó una información explosiva: “PPK recibió US$ 100 mil del Club de la Construcción”.
La gran estafa continúa en marcha. Los fiscales Rafael Vela Barba, Domingo Pérez –y también el procurador Miguel Ramírez– han confirmado su periplo a Sao Paulo para suscribir los “acuerdos finales de beneficio y colaboración eficaz” con la corrompedora Odebrecht.
Los fiscales y el procurador que han negociado el infamante acuerdo de confesión sincera entre el Estado Peruano y Odebrecht no deberían tener la pedantería de decir que nadie puede siquiera opinar sobre este pacto, sin ser considerado delincuente. No es así, fiscales Vela Barba y Pérez al igual que procurador Ramírez. Todo lo contrario. Más bien los delincuentes podrían ser ustedes tres.
El fenómeno climático que viene desatándose no es novedad. Fue anticipado meses atrás. Y no obstante, la respuesta del gobierno Vizcarra fue lapidaria: son rumores, especulaciones sin sustento.