Hola…
La experiencia vivida esta semana fue tan hermosa que deseo compartirla contigo. Para quienes la vida nos ha regalado la posibilidad de servir a través de los medios de comunicación, experiencias como la que te voy a contar resultan muy alentadoras.
Padre Pablo Larrán García
Hola…
La experiencia vivida esta semana fue tan hermosa que deseo compartirla contigo. Para quienes la vida nos ha regalado la posibilidad de servir a través de los medios de comunicación, experiencias como la que te voy a contar resultan muy alentadoras.
Hola…
Una historia que me ha conmovido profundamente es la de una niña africana y un diminuto caracol. La maestra, emocionadísima, le preguntó a la niña dónde había conseguido ese bellísimo caracol, ya que sabía que solo se encontraban en la playa, a varios kilómetros del poblado donde vivían. La niña respondió:
Hola… El domingo pasado concluimos con esta frase: Te seguiré contando…
Pues bien, te cuento que en la oficina personal del Cardenal Prevost, mi hermana y yo lo esperábamos junto al Padre Edgar Rimaycuna, quien desde Chiclayo ha sido su asistente personal y, desde esta semana, secretario personal del Papa León XIV.
Hola… Dicha sea la verdad en este encuentro dominical, si bien era mi deseo, no necesariamente era lo que iba a suceder, y ¿qué sucedió? No iba a pensar que el jueves de esta semana, a las 11:05 de la mañana, sucedió uno de los momentos para mí más imborrables y entrañables, que si bien es verdad, no entran en una columna como aquella que cada domingo nos comunica.
Hola…
En nuestra conversación del pasado domingo, recordaba mi experiencia personal con el Santo Padre Francisco durante la Audiencia General de los miércoles en el Vaticano. Antes de despedirme ese día, te anticipaba que continuaríamos hablando sobre momentos bendecidos para la Iglesia a través de la figura del Papa Francisco.
Hola…
La mañana del 23 de octubre del año 2024, para mí comenzó muy temprano. Me preparé con gran nerviosismo, pues ese miércoles, minutos antes de las 9:00 de la mañana, y junto a cerca de 50 mil personas, íbamos a acompañar al papa Francisco en su Audiencia General en la Plaza de San Pedro.
Hola… ¡Feliz Pascua de Resurrección! Ante todo, esta expresión de júbilo y de buenos deseos para todos ustedes, amigos y amigas de esta columna, y, por supuesto, del periódico. El pasado domingo, Jesús entraba triunfante en la ciudad de Jerusalén. Lo hacía montado sobre un pollino, un asno, como símbolo de la humildad de aquel Rey proclamado por el pueblo judío.
Hola…
Si bien cada domingo la reflexión sobre las lecturas litúrgicas está reservada para nuestro compañero de viaje en el periódico, el Obispo (e) del Callao, Monseñor José Luis del Palacio, en esta ocasión quisiera invitarlos a reflexionar juntos sobre el Primer Libro de Samuel.
Este pasaje nos presenta a un personaje cuya historia me cautiva profundamente: el rey David.
Hola…
La primera semana de febrero, todos los profesores del colegio Nuestra Señora del Consuelo iniciamos el año académico con jornadas de planificación. Estos días son sumamente importantes, pues, aunque contamos con un camino ya trazado, no somos ajenos a la novedad ni a la posibilidad de generar nuevas expectativas en el proceso educativo.
Hola... Hace meses que no escuchaba hablar de uno de los escritores más reconocidos de la literatura moderna: Paulo Coelho, sus libros, conferencias, reflexiones... este escritor brasileño nos ha dado tanto y con tanta maestría.
Hola…
Hoy quiero compartir contigo una anécdota que me dejó una profunda reflexión. La escuché en una entrevista que circulaba en Facebook, en la que participaba un personaje muy conocido de las décadas de los 80 y 90 en España.
Hola… No es usual que yo desmerezca mi condición de ser humano o cuestione el valor de haber nacido como tal. Sin embargo, en más de una ocasión, debido a mis propias acciones o a las de personas cercanas, o incluso por las noticias que llegan a través de los medios de comunicación, me he sorprendido pensando, quizá de manera exagerada, que habría sido mejor nacer como mascota.
Hola…
En este último domingo del año, los invito a recorrer juntos dos caminos que nos conducen al mismo destino: Dios.
Hola… En estos días previos a la Navidad, quiero compartir contigo una historia de la mitología griega que invita a la reflexión. Es la historia de un hombre nacido de la unión entre un dios y una mujer humana. Este niño, al nacer, fue llevado por su madre al río Estigia, con la esperanza de que, sumergiéndolo en sus aguas, se volviera inmortal.