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Martha Meier M.Q.

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El hambre derriba gobiernos, dictaduras y monarquías. Por hambre y bancarrota se detonó la Revolución Francesa (1789-1799) y volaron guillotinadas las cabezas de Luis XVI de Francia y más tarde la de su esposa María Antonieta, amén de que toda su inocente descendencia fue borrada de la faz de la Tierra bajo el lema “libertad, igualdad, fraternidad”.

Simpatizantes de Pedro Castillo secuestraron el miércoles a periodistas de América Televisión, y bajo amenaza obligaron al reportero Eduardo Quispe a leer un ‘comunicado’. El domingo anterior Quispe presentó en Cuarto Poder un vídeo donde se ve a la joven Yenifer Paredes Navarro aparentemente ofreciendo obras de saneamiento sin ostentar cargo alguno en el Estado.

El inquilino de Palacio se reunió “con los máximos representantes de las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP)”, según tuiteó el 28 de junio. Según tuiteó, el peculiar cónclave fue porque “los trabajadores peruanos merecen una jubilación digna”.

Todo régimen comunista necesita un ‘enemigo de mentira’, adversarios existentes solo en su narrativa. Stalin, Mao, Hitler, Fidel y Chávez no habrían podido instaurar sus dictaduras criminales si un enemigo real les hubiera enfrentado con un enérgico discurso ideológicamente rival. Ese enemigo verdadero no existió y tales sátrapas avanzaron a sangre y fuego.

Ollanta Humala ayudó a que el castro chavismo se abriera paso en nuestro país. Pedro Pablo Kuczynski, PPK, lo sabía y calló. El gobierno de Humala (2011-2016) fue inservible y corrupto, para muestra la costosísima refinería de Talara. Con él comenzó el derrumbe de la democracia liberal peruana. Nos enrumbó a los brazos de cualquier Pedro Castillo.

En el discurso inaugural de la biblioteca de Fuente Vaqueros, su pueblo natal, el poeta español Federico García Lorca dijo: “No solo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle, no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro”.

Los problemas que enfrenta Castillo por su presunta corrupción son nada comparados con lo que no podrá evadir: la escasez de alimentos en medio de la anunciada hambruna global. Puede entonces que termine abruptamente su experimento castro-chavista y su caída corra por cuenta de los estómagos vacíos. Según el hombrecito “la hambruna les va a dar solamente a los que no trabajan, a los ociosos”.

Algún camarógrafo distraído filtró un guateque palaciego en el que se vio a Pedro Castillo con gremios campesinos. Se suponía que estaba reunido con representantes indígenas, pero sentado a su siniestra y dueño del micro tenía a ese peligro al volante llamado Luis Alberto Mendieta Gavirondo.

En una columna publicada ayer me referí al ‘petro-terrorismo’ padecido en el pasado por Colombia a manos del Ejército de Liberación Nacional, ELN.

Estamos a una semana de una potencial derrota del comunismo en Colombia. De ser así será una extraordinaria noticia para la región capturada por los hijos ideológicos de Fidel Castro.

El periodismo caviar es abiertamente anti fuji-porky-aprista. Ha perdido todo pudor y ha renovado su narrativa mendaz y polarizadora, atacando a las marchas por la vacancia o renuncia de Pedro Castillo.

La cofradía de parásitos enquistados en el poder y jamás elegidos, es decir los caviares, vociferan “que se vayan todos”, y no por ser necesario para el país o bueno para la democracia sino porque está esfumándose la posibilidad de que su emperatriz Dina Boluarte sea presidente ante la eventual vacancia -algo complicada- de Pedro Castillo.

“Odebrecht pone y saca presidentes, Odebrecht es dueño del Perú, Odebrecht es dueño de Latinoamérica”, dijo en 2014 Daniel Figallo, ministro de Justicia del humalismo a Yeny Vilcatoma, entonces procuradora adjunta. La doctora Vilcatoma grabó esas palabras para la posteridad y evidentemente fue despedida.

El experimento castro-chavista no pudo llegar en peor momento. Son ya diez meses del gobierno más inútil y delincuencial sufrido jamás en esta tierra nuestra.

La participación de la vicepresidente y ministra Dina Ercilia Boluarte en el Foro Económico Mundial, en Davos, fue desde todo punto de vista miserable. Lanzó una inoportuna diatriba contra la minería y mostró su profundo desconocimiento sobre estrategias para erradicar la pobreza.

Lo que faltaba en medio de la tragedia política que padecemos, debemos soportar la presunta aventura amorosa (mensajitos incluidos) de Martín Vizcarra con Zully Pinchi Ramírez, una abogada, excandidata al Congreso por Somos Perú, dizque escritora, aunque lo único conocido de ella es eso de “enróllame como azúcar en polvo en un pionono de vitrina”.

Si el Congreso no promueve la censura del ministro de Desarrollo Agrario y Riego, el dos veces acusado de homicidio Óscar Zea Choquechambi, el Legislativo será cómplice de la hambruna que ya acecha al Perú. Zea es un maestro escolar carente de los conocimientos para el cargo que desempeña.

Patricia Chirinos, tercera vicepresidenta de la Mesa Directiva del Congreso, recibió duras críticas de la tribu de los políticamente correctos. La vocería de la neo-inquisición considera que se burló del físico de la ministra de Trabajo y Promoción del Empleo, Betssy Betzabé Chávez Chino, porque su discurso interpelatorio contenía frases con doble sentido.

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