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Carlos Prado Vigil

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Y entramos ahora a una nueva semana, arrastrando los mismos conflictos, con los mismos tira piedras, con los mismos policías, con los mismos reporteros, pero con una presidenta que, literalmente, tiró una papa caliente al Congreso.

La semana pasada llegamos a un punto de agitación importante, fuimos testigos de destrozos, incendios de propiedad privada y demás desmanes que por algún insano motivo hemos normalizado. Es entendible que todos queremos y podemos hacer uso de nuestro derecho de protesta, pero aquí les dejo unas ideas sobre cómo protestar de manera óptima:

Las últimas semanas, pasado el evidente “break” de fiestas navideñas y celebraciones de Año Nuevo, hemos vuelto a nuestra realidad nacional cada vez más convulsionada. Vemos una gran cantidad de disturbios totalmente injustificados, daño a la propiedad privada por doquier, manifestantes con discursos que muchos ni entienden, en fin, caos total.

La semana pasada fue la primera vez, después de tres años escribiendo esta columna, que estoy imposibilitado de entregar mi artículo... Me robaron el celular a plena luz del día, llevándose consigo toda mi información.

Es increíble ver cómo en tan poco tiempo puede cambiar tanto la historia; lo hemos visto en este mundial de fútbol, cómo Argentina sintió por unos minutos que el sueño de levantar la copa se le desvanecía entre los dedos, cuando en 2 minutos Francia con 2 goles de Mbappé le igualó el partido, la historia ya la conocemos, pero así como en el fútbol, en la vida cotidiana es igual...

La semana pasada, casi como un lamentable presagio, escribía sobre la insostenibilidad de un sistema de gobierno partido, donde de manera vil y frontal teníamos al legislativo y ejecutivo completamente enfrentados en una guerra llena de amenazas, ataques, discursos de odio, y lo que es peor, a costas de un país que tomaba partido por uno u otro extremo.

Cuando pensamos en sistemas de gestión que no funcionan, o que al verlos operar se nota una gran dificultad para avanzar, generalmente, pensamos que esto se debe a que los recursos involucrados son deficientes, que no hay un norte claro, entre otras variables que, de manera inmediata, nos invaden; pasa en el fútbol, pasa en las empresas, y claramente, pasa en el gobierno.

Generalmente, cuando estamos cerca a las elecciones presidenciales, he notado que, de manera colectiva, empezamos a repetir aquellos flagelos que en décadas no logramos resolver: sistema político corrupto, falta de servicios básicos en muchos lugares del país, sistema educativo quebrado, sistema de salud insuficiente, etc.

Y llegamos a los últimos 30 días productivos del año, considerando que los últimos 10 días se nos van en celebraciones sociales entre amigos y familia, las empresas en su mayoría ya piensan en el año entrante y, en general, todos entramos en modo descanso, muchas veces sin estarlo.

En los últimos años, he tenido la oportunidad de poder estar en diferentes escenarios hablando de emprendimientos, desarrollo de empresas y todo aquello relacionado a cómo dar los pasos correctos para llevar a cabo un negocio con éxito; siempre insistí en lo mismo, las habilidades blandas son la clave en este proceso.

Conforme avanza el año, todos empezamos a cruzar dos realidades, lo que hemos proyectado lograr durante el año y lo que realmente hemos logrado; muchas veces lo hacemos de manera empírica, pero lo hacemos igual. En esta situación, debemos encontrar la manera de mirar hacia atrás y decir, “¿qué gastos he tenido que han sido totalmente innecesarios e irrelevantes?”...

Siempre he pensado que las famosas “frases cliché” o dichos populares son armas de doble filo, esto es porque en teoría estas frases se construyen mediante hechos que han sido muy repetitivos en diferentes contextos sociales, en diferentes épocas y en general, en todo tipo de personas, por ello es que se dan casi como postulados de vida...

El fin de semana pasado fuimos a un centro comercial con mi familia, no solemos hacerlo regularmente, pero había que comprar diferentes cosas y no hay mayor variedad de oferta que en un centro comercial.

Es impresionante la velocidad con la que se ha reactivado el sector entretenimiento; es excelente para todos aquellos involucrados en este sector que se vio tan golpeado por la pandemia, pero es inevitable pensar en cómo se ha dado esto y sin embargo otros varios sectores aún no logran revertir dicha situación.

Luego de varias semanas envueltos en la fiebre electoral, teniendo ya electos a nuestros representantes, nos debemos realmente poner a pensar en qué podemos hacer en los próximos cuatro años que puedan, esta vez sí, generar un impacto positivo en nuestras respectivas ciudades.

Mientras el continente era testigo una vez más de la toma de mando de una posible potencia mundial de parte de un claro régimen comunista, el Perú, a través de las elecciones municipales, le dio el mando a un candidato que su lema es “Lima, potencia mundial”, marcando así un camino diferente al gobierno de turno, los diferentes municipios del país hablaron y dijeron NO AL COMUNISMO.

Este fin de semana que acaba de pasar, empezó de una manera bastante emotiva para quienes disfrutamos del tenis, se retiró Roger Federer, quien ha sido por más de 20 años el mejor tenista del mundo, entregando todo por el deporte que ama y dándonos a los espectadores innumerables espectáculos que jamás olvidaremos; así empezaba el fin de semana...

Siempre hemos leído nuestra realidad como la de un país con muchos retrasos frente a los avances tecnológicos del mundo, es evidente que países con más recurso y más capacidad de inversión van a llevar el liderazgo en muchos aspectos, sí, pero la enorme ventaja que existe hoy con toda la disponibilidad de información es que la competencia es más equilibrada y queda a merced de la creatividad y

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