La fracasada “Toma de Lima” debiera servirle al gobernante Pedro Castillo para darse cuenta que el “pueblo”, que tanto menciona, está preocupado por asuntos muy distintos a los de sus ideas ye-yé de cerrar el Congreso, llamar a una Constituyente o cualquier otra de sus livianas epifanías.
Martha Meier M.Q.
El llamado ‘Acuerdo de Colaboración Eficaz’ con Odebrecht era secreto inclusive para el fiscal de la Nación. De hecho, el fiscal Pedro Chávarry fue retirado al querer conocer el contenido del documento clandestino. Quienes levantaron su voz contra el acuerdo de marras fueron tildados de “blindadores”, “fujiapristas” y demás artillería propia de la izquierda y de los caviares.
Según el premier Aníbal Torres el gobierno de Pedro Castillo es parte de una “izquierda inteligente”. Tal cosa no existe porque en todos los lugares donde se enquista la izquierda solo se destruye la economía, desperdicia recursos, degrada el medio ambiente, se genera violencia, muerte y miseria, profundizando la corrupción, la impunidad y la desigualdad.
Ser un gobernante democrático no es tarea fácil, lo más simple es destruir un país, como lo hace Pedro Castillo y esto en nombre de la Patria Grande, narco-castro-chavista.
La desconexión de los partidos y movimientos políticos con la realidad y los sueños de la gente de a pie, es insoportable. El régimen de Castillo no descifra a sus gobernados, antepone sus propios intereses a los del país, mientras la oposición sólo reacciona ante el cleptócrata de Palacio y no logra diseñar un proyecto democrático que entusiasme a las mayorías.
La progresía globalista se lamenta. Los patriotas celebran. Elon Musk entró con pie firme a Twitter, despidió a los altos ejecutivos proclives a la censura y el mundo es hoy un poco más libre. El hombre más rico del mundo lanzó el tuit “El pájaro ha sido liberado”, tras cerrar la compra de la red social por 44 mil millones de dólares.
“Hay que asfixiar a Porky (Rafael López Aliaga), dejarlo sin presupuesto y sin espalda financiera”, recomienda a Pedro Castillo, Biberto Castillo, otrora asesor humalista del despilfarrador Ministerio de Economía y Finanzas, MEF, y hoy con prisión preventiva por presuntamente integrar la organización criminal presidencial.
“No soy comunista” dijo en su último mensaje a la Nación Pedro Castillo. Todos los comunistas dicen lo mismo en su ruta por concentrar el poder.
La fiscal de la Nación Patricia Benavides presentó una denuncia constitucional contra el presidente Pedro Castillo. Benavides sostiene que se hallaron “muy graves y reveladores indicios de la existencia de una presunta organización criminal enquistada en el Gobierno con la finalidad de copar, controlar y direccionar los procesos de contrataciones”.
“En política sólo triunfa quien pone la vela donde sopla el aire; jamás quien pretende que sople el aire donde pone la vela”, escribió el poeta Antonio Machado.
La ‘ideología de género’ es una creación del socialismo del siglo XXI, es decir, de los intérpretes postmodernos del marxismo. Los socialistas y comunistas, huérfanos de ideas desde la caída del muro de Berlín, se aferran a ese tema, sin asidero biológico ni lógico, porque no tienen nada más.
La activa y heroica participación de los afrodescendientes en la construcción y defensa de la patria, así como en la política y en la literatura son poco conocidas. Maruja Muñoz Ochoa lo sabía, por eso se dedicó a investigar y a publicar una serie de artículos rigurosos y de gran valor para el conocimiento de la riqueza de saberes de nuestro país.
Las autoridades electorales se han ganado a pulso la desconfianza de los votantes, al punto de que los resultados de las elecciones regionales y municipales de hoy generarán sospechas de toda índole. Este fenómeno no es exclusivo de nuestro país sino un mal que se extiende alrededor del globo, tanto en las democracias más sólidas como en las precarias.
No contentos los comunistas con apoderarse de las banderas del ecologismo, ahora lo hacen los voceros del narcoterrorismo, como el tuco Petro devenido en presidente de Colombia. Su primer discurso en la ONU tuvo por objetivo convencer al mundo que la economía de la cocaína es una nueva vertiente ecologista, de conservación de la naturaleza.
El bienestar de las sociedades se ve profundamente afectado por la impunidad. Es un freno para la seguridad, el desarrollo y el pacto moral de las naciones. No castigar a los delincuentes genera en la población una sensación de que los criminales son más poderosos que el imperio de la ley, especialmente los delincuentes de cuello y corbata.
Tradicionalmente el marxismo identificó como lumpen a lo más bajo del proletariado, un sector carente de conciencia de clase. Es el lumpenproletariado, del alemán “Lumpenproletariat”, es decir, algo así como el proletariado de los harapos. El término fue acuñado por Karl Marx y Friedrich Engels, a mediados del siglo XIX en su obra “Ideología alemana de 1845”.
Pedro Castillo usó a niños con cáncer para promover su imagen. Los llevó a Palacio, televisó el encuentro y les dijo haber destinado más de cuatro mil millones de soles para garantizar la cobertura integral de sus tratamientos. El 12 de mayo, Castillo mintió y dio una falsa esperanza a esos pequeños y a sus angustiados padres. A los pocos meses se supo que todo fue un macabro montaje.
El escritor danés Hans Christian Andersen escribió: “Solamente vivir no es suficiente. Uno debe tener sol, libertad y una pequeña flor”. Lima, como todas las ciudades y distritos del país, necesita un alcalde capaz de darnos esa “pequeña flor”.