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Francisco de Piérola

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Hacer la radiografía de un caviar en la educación universitaria es transparentar la historia de vida de un agente que tiene por modus operandi el canje de los principios por la comodidad mercantilista.

¿Cuántos poderes tiene el Estado peruano? La respuesta es sencilla, en realidad. Pero la realidad no suele importar en el mundo de la posverdad progresista que suele acomodar las cosas a su antojo para que calcen dentro del objetivo de su narrativa. La verdad solo es “cierta” cuando ha sido oleada y sacramentada por uno de estos falsos ungidos en “certeza”.

Esta frase, pronunciada en la gran serie de HBO “Game of Thrones”, tiene, hoy, más sentido que nunca en nuestro país, sobre todo, teniendo en cuenta lo acontecido en la minera la Poderosa, el pasado sábado. El caos es una escalera o, dicho de otra manera, la crisis es una oportunidad. El problema está en que cualquiera puede subir por la susodicha escalera.

La victoria de Javier Milei en Argentina ha despertado amor y odio entre admiradores y detractores por igual. El éxito del argentino se ha sentido con estruendo en el mundo globalizado, causando furor a nivel internacional, como es propio de una “estrella de rock” de las redes.

El pasado fin de semana jugaba con mi sobrina el popular juego infantil del lobo y la ronda, o el bosque, según otras versiones. “Lobo, ¿qué estás haciendo?” es la pregunta que debe ser sucedida por respuestas risibles, propias de la creatividad infantil o del adulto que desea congraciarse con los niños.

No me refiero a su ubicación en el espacio o en el tiempo, sino a su ubicación en el espectro político, si es que la tiene. ¿Cómo va a ser recordado este gobierno? La percepción es que nos encontramos ante un gobierno de derecha y, puntualmente, ante uno que no está haciendo un buen trabajo.

Debería ser la pregunta del millón; sin embargo, la ubicación del secretario general de Perú Libre ha quedado en segundo plano debido al conflicto que se ha acentuado en el Medio Oriente. Voy a recusarme de la responsabilidad de hablar de Israel y Palestina para enfocarme en “El Portero de Palacio”.

El premier Alberto Otárola, quien para muchos es quien lidera el Ejecutivo, ha sido tendencia en las redes sociales por diversas razones en la última semana. Ha aparecido con frecuencia en los “Mundos Paralelos” (un poco de autocherry nunca está de más). Revisemos cuáles han sido sus apariciones.

Todos los días, cuando regresaba de clases durante mi infancia, pasaba por un colegio y me llamaba la atención. Durante ese corto viaje en carro con mi mamá y mis hermanos miraba siempre por la ventana, pero ese colegio era el que más atraía mi mirada. Las lunas de las aulas, que se veían desde la calle, tenían una “X” dibujada. O al menos así pensaba. Eran los años 90.

Estaba revisando las redes sociales y me tomé con la sorpresa de que una de las tendencias corresponde a un influencer cuyo personaje ha superado la realidad, causando una disociación de su percepción que ahora quiere ser impuesta coercitivamente en la sociedad.

Cada día me convenzo más de que el progresismo es marxismo cultural. Es una versión aligerada, rebrandeada y renovada en forma del siempre fracasado plan comunista. Lo que se está buscando hacer con la familia en el Perú es un perfecto indicador de ello.

Cada vez se hace más difícil defender a la presidente Dina Boluarte. Su mensaje a la nación, el pasado 28 de julio, fue epopéyico en forma y no en fondo, y ese hecho no pasó desapercibido por la mayoría de detractores con los que ostenta la mandataria, afuera de los poderes del Estado. Eso hace que cada vez sea más fácil y atractivo estar en contra de Dina Boluarte.

Fascismo, neoliberalismo, capitalismo, fujimorismo, son algunas palabras que se usan con regularidad en el mundo de las redes. También, por supuesto, se usan otras como comunismo, terrorismo, caviarismo, progresismo. Se usan en estado natural o conjugado, pero se usan siempre de forma peyorativa.

Recuerdo en la universidad que en varios cursos le daban mucha importancia a la diferencia entre eficacia y eficiencia. Era necesario comprender estas palabras que parecen ser las mismas. Hoy, 15 años después, le doy un uso a ese conocimiento gracias a una reciente ley que ha sido aprobada en el Congreso.

Estamos a casi un mes de la llamada “tercera toma de Lima”. Una movilización presuntamente masiva que busca sacar a Dina Boluarte, restituir a Pedro Castillo, cerrar el Congreso, convocar elecciones, convocar una asamblea constituyente, redactar una nueva constitución y comprarle a Gahela una casa con dinero del Estado. ¿Algo más?

Este pasado domingo 4 de junio se celebraron las elecciones congresales en el Perú. En la realidad, no, pero en el mundo imaginario de Pedro Castillo Terrones, habría sido de esta manera.

Disney ya no es lo de antes. La constante imposición ideológica que hay en su nuevo contenido es verdaderamente preocupante. Hace unos días entré a su plataforma digital para revisar qué contenido tenía y me puse a recordar mi infancia con los títulos originales de la casa de Mickey.

“Mi presi, tu presi, nuestro presi”. Aún recuerdo con pesar a aquellos que aplaudían con bombos y platillos al expresidente Martín Vizcarra Cornejo. ¡Y hasta le cantaron happy birthday! Qué vergüenza haber sido un Vizcarralover. Hoy parecen extintos. Pasó de moda apoyar al caviar de turno, así lo informó la prensa afín.

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