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Martha Meier M.Q.

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La parlamentaria morada, Susel Paredes Piqué, otrora simpático personaje de la telenovela ‘Carmín’, en entrevista con Nicolás Lúcar dijo que Dina Boluarte debía renunciar. En ese pedido no hay un afán de que las aguas vuelvan a su nivel, porque con Dina o sin ella ya no hay quien las calme. Susel quiere lo que Dina tiene: la presidencia, el seductor poder.

Las manifestaciones han alcanzado características de revolución. Si quiere calmarse un poco las aguas, las elecciones generales deben darse este año, lo antes posible. Esto porque no hay forma de que Dina Boluarte se sostenga en el poder mucho más y su caída generaría la sensación de triunfo en la muchedumbre que pide su cabeza. El Congreso no tiene tiempo, tampoco, para reformas políticas.

Juliaca quedó a merced del terrorismo, como en los peores momentos de la década de los años ochenta. Los sediciosos tomaron el aeropuerto e incendiaron una tanqueta de la Policía. La barbarie ha escalado en todos los puntos del sur peruano donde el pedófilo altiplánico Evo Morales tiene influencia.

La señora Dina Boluarte repite innecesariamente que es una mujer de izquierda. Algo obvio pues integró la plancha presidencial de Pedro Castillo, representando al partido marxista leninista mariateguista, Perú Libre.

El arribo de Rafael López Aliaga a la alcaldía de Lima es, sin duda, de lo poco para celebrar en el primer día de 2023. El popular “Porky” está concentrado en recuperar la capital del Perú para convertirla en una ciudad que despierte admiración.

La palabra del 2022 es ‘permacrisis’, fue elegida por el Collins English Dictionary porque define el padecimiento global de los últimos años. Por mucha esperanza que se tenga, el 2023 no será mejor.

La progresía debería considerarse una enfermedad mental. Quienes la padecen pretenden que la humanidad, equilibrada, siga sus pasos confusos, por caminos torcidos y peligrosos, que cumplamos todos sus caprichos y compartamos sus alucinaciones. Están en guerra abierta contra las creencias y valores occidentales, el lenguaje y la ciencia.

Un sector de la población parece bajo los efectos de la burundanga cuando Dina Boluarte habla y se repite a sí misma.

Ayer por la mañana, Dina Boluarte estrenó una nueva modalidad de Conferencia de Prensa/Mensaje a la Nación/Solapado anuncio de posible candidatura. Tres en uno por cadena nacional.

Dina Boluarte ha generado caos desde el primer día que reemplazó a Pedro Castillo. Es una mujer que no está libre de señalamientos por actos de corrupción. Según informa Raúl Tortolero, del Panampost, tiene “lazos estrechos con Juan Carlos Monedero, uno de los liderazgos de Podemos, ese partido de ultraizquierda española, quien viajó en julio de 2021 a Perú.

El Perú arde mientras la gobernante de chiripa Dina Boluarte cometió su primer error político: juramentó a un gabinete técnico y académico, con algunas buenas personas, pero sin muñeca política que es lo que se requería.

Dina Boluarte debe renunciar al encargo de la presidencia por el bien del país. Su juramentación ahonda la crisis desatada por el inexplicable autogolpe que Pedro Castillo ensayó el miércoles. Si bien las instituciones democráticas contuvieron la instauración de una dictadura, no cuentan con herramientas para encauzar las movilizaciones espontáneas a lo largo del país.

“Matar o morir” repiten quienes insisten en vacar o suspender a Pedro Castillo. Con ese lema, los congresistas de la derecha de los lobis frustrados, pretenden convencer a sus colegas de que perderán sus curules y sueldos; que volverán a ser los “nadies”, porque el régimen pretende cerrar el Congreso.

En nuestro país sólo deberían votar quienes tributan directamente, son accionistas de empresas, trabajadores formales, inversionistas, jubilados que aportaron a lo largo de sus años productivos, o en capacidad de demostrar que han establecido un pequeño negocio y creado trabajo temporal honesto y deportistas triunfadores.

La emperatriz de los caviares Dina Boluarte tuvo un arrebato, poco creíble, de dignidad al comunicar que no integraría el nuevo gabinete, presidido por Betssy Chávez Chino. Lo cierto es que es un secreto a voces que estas dos no se tienen especial afecto, sino todo lo contrario.

La ideología de Pedro Castillo es irrelevante porque ha mutado más que los colores de un camaleón al atravesar un arcoíris. Hasta 2017 militó en ese amasijo llamado Perú Posible, liderado por el corrupto Alejandro Toledo.

Según Jorge Luis Borges uno de los “mayores crímenes” de los ingleses “era haber llenado el mundo de juegos estúpidos, como el fútbol”.

Bajo el eufemismo de la cuestión de confianza, el Congreso recibió el jueves un inesperado golpe del premier Aníbal Torres. Ocurrió al día siguiente de que el Legislativo admitiese a trámite una denuncia constitucional de la Fiscalía contra el presidente Castillo, acusándolo de ser el líder de una organización criminal enquistada en el Gobierno.

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